Ignorancia

Somos responsables de lo que sucede, siempre responsabilizando al que tiene enfrente, pero nadie voltea a ver que en verdad está en nosotros el cambio, ¡sí, está en ti y depende de ti, de nadie más!

Cuando comencé a estudiar el cuerpo humano, hace muchos, pero muchos años, entendí que estábamos formados de la manera más rica y abastecida del mundo, cada uno de nosotros tenemos un tesoro incluido, cuanto más lo estudio y más profundizo, puedo decir, e incluso lo podría firmar ante notario, que ¡tú tienes el poder!

En y’u nos dedicamos 24 por 7 a enseñarle a las personas cómo obtener control sobre su cuerpo, más en específico a evitar el dolor: a decirte cómo a través de ti y de entender mejor lo que llevas dentro, en relación de lo que hay afuera, puedes o no controlar; te llevamos de la mano hasta que conozcas de lo que eres capaz.

También escucho a muchas personas diciendo qué cuestiones las hacen infelices, hoy te diré que eso es ignorancia, porque debes saber que él o la única que decide eso eres tú, ya que tienes la capacidad de modificar cómo te tratan, cómo tratas a los demás, cómo participas en tu familia, cómo está tu ciudad, cómo está incluso tu país, o el mundo entero y lo más extremo de todo es ¡cómo estás tú!

Cuando estudié matemáticas aplicadas entendí lo que coloquialmente llamamos metalenguaje, que es el lenguaje dentro del lenguaje, “Las teorías de la complejidad” justo hablan de esto. Un ejemplo que me parece muy fácil de entender es el de un torbellino (que ahora está tan presente eso del clima y de la naturaleza).

Dentro de los torbellinos hay millones de torbellinos más; se hacen infinitos y se alimentan uno del otro y cuando uno de ellos deja de tener fuerza, velocidad y alcance, desaparecen, pero si por el contrario, los vientos toman fuerza y velocidad, todos los demás también crecen.

¿Qué pasaría si te dijera que eres responsable de crecer y hacer crecer a los demás como torbellino? Que tú puedes convertirte en una influencia para ti y para los que te rodean y así sucesivamente, para que encuentres estar en y cómo tú quieras.

Como dice la tercera ley de Newton “A toda acción, corresponde una reacción, de igual magnitud y sentido contrario”. ¿Qué tal si hoy te convierto en Keyra —uno de mis personajes— y lo repites a diario?

Keyra es un armadillo que tiene un gran caparazón y a través de éste, adquiere la capacidad de aislarse de los demás para así conocerse mejor y entonces poderse entregar a los demás.

Si tú te amas todo el tiempo y lo aprendes a hacer para luego amar a quienes tú eliges y darlo también a la comunidad, a tu colonia, a tu ciudad, a tu estado, a tu país y así consecutivamente, nos convertiríamos en el torbellino más fuerte y grande del mundo.

Ahora el asunto es ¿cómo? Empieza por KEYra, que será la llave para abrir el universo de universos que están dentro de ti y al mismo tiempo, empieza a entender cómo afectar, de manera positiva, todo lo que está alrededor de ti.

Para ser como Keyra te enseño a que te pongas en posición fetal y te tapes con una colcha completamente, como si te cerraras en un caparazón, luego inhales y sientas amor por ti, y al exhalar escuches los latidos de tu corazón.

Si todos los días hicieras esto, estarías provocando un cambio bioquímico natural en tu cuerpo, que genera serotonina y en consecuencia endorfinas (la hormona de la felicidad le dicen por ahí), de ahí no es todo ni tampoco suficiente, ya que debes de empezar a accionar de manera concreta para generar esos cambios que verdaderamente harán el torbellino de torbellinos.

Acciona, provoca los cambios con acciones, si lo haces y eliges hacerlo con mucho amor y además entiendes cómo cuidarte y estás bien, te llevará a tener más fuerza todavía. ¡Bienvenidos al mundo de conocer que tú eres el responsable, y tú eliges cómo vivirlo!