No hay nada más saludable que dar amor
En unas cuantas horas será Navidad, los festejos y abrazos han comenzado, si yo pudiera explicar a nivel bioquímico lo que tu cuerpo genera al saber que va a estar entre la gente querida compartiendo y gozando de estar juntos: sería Navidad todos los días, no hay nada más saludable y energético que dar amor, el hecho de sentir amor y además compartirlo es genial.
Cada abrazo que des hoy cuenta: siente amor y sé consciente de ello. Cuanto más lo hagas, mejor te va; tu cuerpo comenzará a segregar serotonina para después producir endorfinas y a éstas se les llama “la morfina del cuerpo” porque en realidad te hacen sentir muy bien y comienza a crecer la bola de nieve como cuando baja una montaña.
Si en este momento te encuentras solo y no vas a ver a nadie, está en ti generar estas sustancias, porque es sólo cuestión que te pongas en la memoria momentos donde puedas sentir amor. Intenta, verás cómo puedes producirlas, y si de plano no encuentras recuerdos que te hagan sentir amor, pues empieza a formular experiencias que sí te hagan percibir dicho sentimiento y todas éstas te harán sentirte muy bien.
En la app y’u bubble tienes burbujas de emociones (verdes), en realidad en la app siempre trabajo con ellas, es uno de mis mejores ingredientes para que las personas se curen, y esto se debe a las sustancias que segregas al sentirlo, por lo que te invito a ser consciente de cuáles emociones debes y tienes que vivir; en la historia nos hemos encargado de poner denominaciones y adjetivos a éstas: “no estés triste, te doy una paleta y ya quita esa carita” pues en mi metodología te invito exactamente a lo contrario: expresa la emoción que estés viviendo porque tu cuerpo contrae ciertas partes cuando experimentas una emoción, si tú no la vives y la exteriorizas no te liberas de ella, entonces si estás triste llora y manifiesta esa emoción.
Cuando yo le pedía a Rebeca que llorara o gritara porque le dolía, ella no podía hacerlo, porque yo llevaba siete años exactamente dándole la paletita y diciéndole que no estuviera triste, ahí fue cuando me di cuenta que si no diseñaba un personaje que hiciera los gestos de la emoción y que además la hiciera consciente que la estaba viviendo, no iba a poder ir para adelante, al contrario.
Cuando abres la burbuja (es un miniclip) de una emoción como amor, tristeza, enojo, angustia, te enseño a través del personaje cómo expresar cualquiera de estas emociones y liberas las tensiones que tu cuerpo produce al sentirlas: al expresarlo y hacer el gesto psicológicamente aceptas cómo te sientes, y para poner la cereza en el pastel se quitan las contracturas musculares que ésta provoca al imitar al personaje: cuando me refiero a éste, es animado y tiene que ver con lo que representan para la mayoría de la humanidad. En el momento que te representas todo lo que te dijo tu mamá o quien te educó, ya no importa porque tu cerebro lo comprende como otra cosa; si estás hoy triste querrás tu paletita porque así fuiste educado, y no lograrás sentir esa emoción, expresarla, vivenciarla: si abres la burbuja de tristeza, te haré alargar el cuello (quita el nudo en la garganta), sacar la lengua (abre las cuerdas vocales), hacer el gesto de tristeza (tu cuerpo genera en ese momento serotonina) y todo esto te hará sentirte libre.
¡Así es que a partir de este momento aprende a vivir y experimentar con tus emociones! Y lo que espero que sea un regalo para ti hoy: tú puedes sentir y segregar lo que hace la emoción que quieras solo por usar experiencias pasadas. Tu cuerpo es tu propia tecnología, úsala a tu favor ¡FELIZ, FELIZ NAVIDAD!